Tras largo tiempo anunciado, llega al fin el análisis de la lectura propuesta para este mes: Una novela de ajedrez, que podría muy bien solucionar enlazando la entrada a la página de Wikipedia que habla sobre ella, pues me parece agradable de leer y, además, coincide bastante con la idea que me hice de la historia al leerla.
Ésta es, al parecer, la última novela que escribió Stefan Zweig antes de suicidarse y, según he leído, su obra maestra. Respecto a este último punto, no puedo opinar pues, incluso habiendo leído algunas de sus obras, no me veo con conocimiento de causa suficiente para hacerlo. Recuerdo con especial gusto Veinticuatro horas de la vida de una mujer, que encontré en la biblioteca de mi madre una siesta veraniega y leí en mi adolescencia. Luego, alguno de sus títulos ha caído, pero no demasiados (lo cual probablemente se enmedará, pues no descarto volver a proponer una lectura de Zweig en esta casa).
Pero, y yendo al grano, que me escapo sin sonrojo de mi tarea, me ha encantado esta Una novela de ajedrez, que no deja de ser sino la historia que Zweig construye en torno a una curiosa paradoja, la que nos cuenta cómo la solución para no enfermar que encuentra un cerebro torturado a través del inhumano martirio de condenarlo a la más terrible soledad e interminable ociosidad, alejada de cualquier actividad intelectual, acaba, al fin, convirtiéndose en una neurosis enfermiza que termina por conducirle a la locura. Este bonito lazo que propone el autor, sirve además de maroma con la que atar una descarnada crítica al nazismo y sus temibles métodos de tortura.
Pese a que Zweig no se preocupa por matizar demasiado a sus personajes y rodea la historia con un cierto velo que obliga al lector a observar los acontecimientos como si escudriñara a través de los visillos de una ventana, la historia transcurre con una fluidez tal, que finalmente aparece a nuestros ojos como un todo perfectamente definido. Es la obra de un escritor magistral.
Me ha gustado mucho. Espero que vosotros también la hayáis disfrutado.
Me ha gustado mucho. Espero que vosotros también la hayáis disfrutado.